Durante la semana había hablado con Jorge para ir al Vivero a ver la vuelta. La idea era subir por la presa Arantzille y llegar hasta la carretera que sube a lo que era el Parque de Atracciones.
Poco a poco hoy se ha ido uniendo gente para ir y al final nos hemos juntado un buen grupo. Eso sí, el día ha sido de un calor insoportable. Cuando hemos salido desde el local del Ariz para el Vivero, la temperatura era de 41 grados.
En el local hemos estado Fernán, Gustavo, Javi, Jorge y yo. Gustavo llevaba un webo de tiempo pero se ha sentado en la otra punta de la plaza y ni Fernán ni yo nos hemos percatado que era él. Cuando ha venido Jorge ha preguntado por él y me ha dicho “si me ha llamado que llevaba en la plaza desde las tres¡¡¡”, y hemos caído en la cuenta que tenía que ser el que estaba en la otra punta sentado. Jeje